En muchas ocasiones, nuestra felicidad pasa por pasos tan
sencillos como elevar el estado de ánimo y cuidarnos. Sin embargo, a veces
esperamos que sea una cuestión del azar la que marque un cambio en nuestro modo
de sentir interno cuando en realidad, es conveniente que seamos proactivos para
cuidar de nosotros mismos con paciencia, amor y respeto.
Aprenderás a elevar tu propio estado de ánimo en el momento en que valores que pocas cosas son tan importantes como para arruinar tu día y tu momento.
Aprenderás a elevar tu propio estado de ánimo en el momento en que valores que pocas cosas son tan importantes como para arruinar tu día y tu momento.
En este artículo te damos ideas para elevar tu estado de
ánimo. ¡Disfrútalas!
Consejos Sencillos
para Elevar el Estado de Ánimo
1. Algunos placeres culinarios muestran caprichos
sencillos. Por ejemplo, tomar un helado es una dulce tentación en una agradable
tarde de primavera y verano. Está claro que por una cuestión de dieta, no es
saludable tomar todos los días un helado. Pero es que además, incluso si
llegamos a tomarlo, dejará de tener ese efecto de elevar el ánimo por
convertirse en un ritual habitual.
2. Ponte ropa cómoda y sal a caminar por la ciudad, por
el parque o por un entorno distinto a tu barrio. Anímate a explorar la ciudad.
Siéntate en un banco y mira a la gente pasar.
3. Ordena tu casa. Por ejemplo, pon en orden tu fondo de
armario, organiza la ropa por colores. El orden externo influye de forma
directa en el estado de ánimo. En muchos casos, las labores de la casa producen
mucha mereza, pero luego, el beneficio es muy alto.
4. Consulta la cartelera de cine y anímate a disfrutar de
una buena peli. El valor de este gesto es tal que incluso puede ayudarte a
estar animado incluso durante más de un día. Las buenas películas dejan una
huella en nuestra memoria, una especie de subidón de energía porque el cine nos
ayuda a darnos cuenta de que en la vida todo es posible. O al menos, es bonito
creer en ello.
5. Camina por la calle y saluda a un desconocido que te
encuentras. Cede el asiento en el autobús urbano a un anciano. Cede el paso en
la puerta del supermercado a otra persona. Estos gestos, cada vez menos
frecuentes en las grandes ciudades, nos recuerdan el valor del humanismo. Y
todo aquello que forma parte de tu propia naturaleza, te hace feliz.
6. Si te encanta ir a la piscina durante el verano, este
es un plan fantástico para conectar con el niño interior que hay en ti.
7. Pon música en casa y convierte tu salón en una pista
de baile. La música crea un marco de expresión para dar rienda suelta a tu
lenguaje corporal. Intenta mover tu cuerpo a partir de tu propia forma de
sentir.
Fuente: el post completo y original lo puedes consultar en psicologiayautoayuda
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